¿Morder las uñas daña mis dientes?
Para muchos, la costumbre de morder las uñas, también conocida como onicofagia, es de lo más habitual. Ocurre en un 20-45% de la población y a cualquier edad. Es un acto inconsciente e involuntario. El aburrimiento, los nervios, la ansiedad y el estrés son las causas que con más frecuencia te llevan a morder las uñas. Las personas con onicofagia asocian el gesto con algo que las tranquiliza y las libera de tensiones.
¿Qué daño puede causar morder las uñas?
Parece que muchas veces el daño que te haces al morder las uñas pasa desapercibido, salvo por las marcas estéticas que quedan en tus dedos. Sin embargo, también puede producir consecuencias perjudiciales para tu salud. Los daños que morder las uñas puede ocasionar en tu boca y tus dientes son:
- Desgaste dental y un deterioro excesivo de los incisivos. El mordisqueo continuo puede erosionar el esmalte de los dientes y producir su deterioro. Sobre todo en el caso de los incisivos. En algunos casos extremos incluso puede producir la fractura de algún diente.
- Mayor riesgo de infecciones. Normalmente, en las manos y uñas hay bacterias, virus y hongos. Al morderte las uñas estos microorganismos pueden llegar a producir una infección en la boca. También pueden afectar a tu organismo y producir diarreas y vómitos. Por ello, se recomienda no introducir las manos en la boca.
- Problemas articulares en la mandíbula. El mordisqueo constante de las uñas también puede pasar factura a la articulación temporomandibular. El problema principal es que el mordisqueo implica una posición forzada para la mandíbula. Puede llegar a provocarte dificultad y dolor para masticar.
- Mal aliento o halitosis. El traspaso de bacterias desde la uñas a la boca puede producir mal aliento. Sobre todo en caso de que se haya generado una infección.
¿Cuándo se produce el daño en la boca por morder las uñas?
Cuanto más tiempo dure el hábito mayor será el daño producido en tu boca. Si ya se han dañado los dientes, lo primero que debes hacer es tratar de acabar con el hábito. Lo segundo que debes hacer es acudir al dentista para que pueda tratar los dientes dañados. Ten en cuenta que si arreglamos un diente pero sigues mordiéndote las uñas, lo normal es que se vuelva a romper. Por lo que será una pérdida de tiempo y de dinero.
¿Cómo puedes hacer para dejar de morderte las uñas?
Lo cierto es que hay que intentar dejarlo lo antes posible para evitar que el hábito se cronifique. Cuanto más pronto se detecte más fácil será controlarlo. En el mercado existen algunos productos con mal sabor cuya función es hacer desagradable el acto de morderse las uñas. Aunque para algunos son útiles, muchos acaban acostumbrándose a su sabor, por lo que esta solución no siempre es efectiva. Sabemos que dejar de morderse las uñas no es fácil. Lo más importante es tener fuerza de voluntad y ganas de dejarlo.
Si tienes algún problema en la boca producido por la onicofagia, o por cualquier otro motivo, no dudes en consultarnos. Estaremos encantados de ayudarte. https://clinicagonzalezconde.es/